Algunas intenciones románticamente anacrónicas, un poco de español-italiano-francés, una pizca de steampunk, gotas de absurdo y aromas surrealistas.
Así puedo definir este emprendimiento de meditación colaboratica que hicimos con Luca Frasca.
Mucho empeño a lo largo de varios meses para encontrar el perfil de ilustración que acompañara sus conceptos.